Una de las líneas históricas de coches deportivos de carreras más memorables del pasado siglo XX fue la famosa serie D-Type producida por la exclusiva firma Jaguar desde 1954 hasta 1957. Sin duda, unade los coches de competición más bellos jamás construidos y cuyas hazañas deportivas aún serecuerdan en el prestigioso circuito de Le Mans. La serie D-Type fue desarrollada a partir de 1954 con el objetivo de mejorar las excelentes características de su precedesora, la Serie C-Type. El ingeniero Malcom Sayer fue la persona designada para la tarea de diseñar un coche deportivo para Jaguar que presentara motores más potentes, un chasis mejorado y una carrocería más aerodinámica. El resultado de su trabajo fue el Jaguar XKD lanzado en 1955, un modelo de diseño futurista que recuerda a un avión de combate por su alerón trasero y su elegante y redondeado cofre. Sayer había trabajado en la industria aeronáutica y utilizó por primera vez en este modelo la estructura monocasco, trasladando conceptos utilizados en el diseño de aviones. Este hecho se puede observar también en una versión posterior, denominada long-nosed, de la que se construyeron únicamente diez unidades. Una de ellas es del diseñador Ralph Lauren. La carrocería estaba realizada en hierro fundido y aluminio. Pese a los materiales de composición de su estructura que le otorgaban un peso de 860kg, era impulsado por el mítico motor XK Straight 6 de 3,442 litros cúbicos y 270CV a 6000rpm que le permitía registrar velocidades máximas de 280km/h. Estas características hicieron que el Jaguar XKD obtuviese tres victorias consecutivas (1955, 1956 y 1957) en las 24 horas de Le Mans, y otra más en Nürburgring en 1956 teniendo a los poderosos modelos de Mercedes Benz como principales rivales en aquella esplendorosa época.